Iglesia de San Pedro Apóstol |
El origen de esta iglesia es una humilde ermita que ya
existía en el año 1278. La construcción de la nueva iglesia se inició por la
cabecera del edificio actual, y en ella intervinieron varios arquitectos, en
1606 Francisco Negrete, en 1627 Francisco Bajo, y en 1634 Juan de Répide. En el
siglo XVIII la iglesia fue reformada por Antonio Crespo y Tomás Martínez.
El edificio está construido con piedra y ladrillo, es muy
austero y tiene una planta muy sencilla, consistente en un rectángulo alargado dividido en cinco
tramos por pilastras toscanas, dispone de capillas abiertas en los muros
laterales de poca profundidad, y está cubierto con una bóveda de cañón decorada
con yeserías geométricas. Dispone de una capilla mayor de planta cuadrada
cubierta con bóveda estrellada, y un coro alto a los pies sobre una bóveda
decorada con yeserías.
La fachada es de piedra en la parte baja, la parte alta
se recubrió en 1967, destaca su portada clasicista con una hornacina cobijando
la imagen de San Pedro Apóstol. En el interior se pude apreciar una buena
batería de retablos rococós.
Planta de la iglesia |